Los biofenoles presentes en Mygrium® forman parte de nuestra dieta a través del consumo de las aceitunas y del aceite de oliva virgen.
Polifenoles como el hidroxitirosol han mostrado que aumentan los niveles endógenos de glutatión (“Olive Phenolics increase glutathione levels in healthy volunteers”; Visioli et al. J. Food Agric Chem. 2009). El glutatión es un componente clave en nuestro cuerpo capaz de prevenir el daño que se produce a nivel celular, causado por especies de oxígeno reactivas como los radicales libres, peróxidos, peróxidos lipídicos y metales pesados.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) recomienda el consumo diario de polifenoles de oliva para la población general y la Comisión Europea aprobó una alegación de salud bajo la normativa CE 1924/2006, declarando que «los polifenoles del aceite de oliva contribuyen a la protección de los lípidos en sangre frente al estrés oxidativo».
Los polifenoles son compuestos naturales bioactivos presentes de forma natural en frutas, verduras, frutos secos y otros vegetales, que son conocidos por su actividad antioxidante y anti-inflamatoria, entre otras.
Los polifenoles han despertado un gran interés desde el punto de vista nutricional, por sus acciones no solo en estado de salud, sino en la prevención de las alteraciones funcionales y estructurales de diversas enfermedades. En los últimos años, se les han atribuido efectos beneficiosos frente al desarrollo de diversas enfermedades (cáncer, enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas).
Los biofenoles presentes en la composición de Mygrium® forman parte de nuestra dieta a través del consumo de aceitunas y aceite de oliva virgen.
El aceite de oliva virgen está compuesto de dos grandes grupos de compuestos, la fracción saponificable, conocida por los ácidos grasos y la fracción insaponificable o llamados componentes menores, entre los que figuran los polifenoles, la vitamina E, triterpenos y otros.
Datos muy recientes, fruto de un cada vez mayor número de estudios científicos, sugieren que los componentes menores del aceite de oliva virgen tendrían más beneficios para la salud que los pensados inicialmente gracias a dichos componentes minoritarios.
El aceite de oliva virgen es una fuente de al menos treinta compuestos fenólicos, entre ellos el hidroxitirosol, la oleuropeina, el tirosol, los verbascósidos, el ácido cafeico y otros. Son potentes antioxidantes y captadores de radicales libres.
La fracción acuosa de la aceituna resultante después de la extracción del aceite de oliva, es la fuente más rica de dichos compuestos fenólicos.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) recomienda la ingesta diaria de polifenoles del aceite de oliva para la protección de los lípidos en sangre frente al daño oxidativo, debido a su elevada capacidad antioxidante.